El Hombre Lento. 12 Febrero 2010. La Casa del Loco.10 euros y regalo del disco.

Presentaron su nuevo disco “ZAZA” en un concierto lleno de personalidad de EL Hombre Lento, me explico, sonaron con la calidez, desgarro, contundencia y claridad de lo que sus temas tratan.

Un concierto en el que tocaron yo creo que todos sus temas, bien del nuevo disco y del anterior intercalándolos de manera muy acertada para mi gusto, ya que me tuvieron enganchado todo el concierto aun estando rodeado de amigos y conocidos.

No se me ocurre nada más ya que no puedo ser mas objetivo. En hora buena por el nuevo parto y a hacerlo crecer.

Cuti. 11 de Febrero 2010. Teatro Arbolé. 15 euros.

Fui sin saber nada de este músico Zaragozano, solo tenía unas pocas de buenas referencias y el impacto que me llevé fue sobresaliente, una banda de lo mas granado del panorama zaragozano (guitarras, bajo y batería), con el aliento de una joven sección de vientos pero nada carentes en carisma y precisión, Cuti al teclado y voz me dejó impresionado, sobre todo, en como le da a las teclas al mas puro estilo Jerry Lee Lewis.

Fue un concierto de Rock´n roll redondo, me sorprendió de las canciones que no es que tuvieran ciertas influencias, lo que no tienen es nada de originalidad, pero como son tan buenas y tan bien interpretadas, se me hizo un concierto la mar de entretenido.

La verborrea que tiene Cuti quizás como el dice le pierda, pero lo que hace es encontrar la sonrisa y la risa del público ante tanta locuacidad, esto no quita de su capacidad como cantante ya que tiene un pedazo de voz. Por cierto, el comentario sobre el rock de Rosendo se lo podía haber metido por el orto.

Pasaron también por el escenario Tachenko, Gabriel Sopeña y Fernando Martín. Estos dos últimos crearon un punto nostálgico por el recuerdo implícito que llevaban que sirvió como memoria a Mauricio Aznar y a Guille Martín.

Rockin’ Johnny con Quique Gomez Band. 10 Febrero 2010. Teatro Arbolé. 15 euros.

Fue un concierto de blues puro y auténtico en donde aluciné con la banda de Quique, armónica, batería y bajista, auténticos blues man, me dejaron flipao (los ya míticos Juan Bourbon,Juan Scotch & Juan Beer).

Rockin’ Johnny no destacó como guitarra solista ya que no me dejó ni frío ni caliente, eso si, como guitarrista acompañante ideal, sin destacar en absoluto y haciendo unos acompañamientos magníficos. Como cantante tampoco me llegó a transmitir nada en ningún momento, en los dos temas que se cantó Quique, el líder y armonicista de la banda, me transmitió mas que en cualquiera que cantó Johnny.